Del abismo y la luz

Salí de las drogas, pero terminaré en la cárcel      

         Las drogas afectaron mi vida de una manera realmente trágica. Me metí tanto en ese mundo, que cuando llegó el momento en que no tuve dinero para comprarla, hice casi de todo. Me ofrecieron vender y yo acepté, pero todo lo que sacaba lo gastaba de nuevo en ella y cada vez contraía más deudas con los que me ofrecían la droga para vender.

         Aquello se fue haciendo cada vez más grande, como una bola de nieve. No encontraba una salida o por miedo, no buscaba una solución a mi problema. Llegué al punto de robar a alguien de mi familia y a mis mejores amigos.

         Ahora ya estoy totalmente recuperado de mi adicción y no consumo ninguna clase de droga. Sin ayuda de nadie salí del ambiente en el que me movía, de la ciudad en la que vivía, pero por culpa de mi adicción, tengo ahora problemas con la justicia. Me enfrento a un juicio por robarle dinero a mis amigos.

         Llevo cuatro años esperando que llegue el momento en que tendré que rendir cuentas de mis actos y en esos cuatro años no he podido descansar ni estar a gusto. Tengo miedo a la cárcel, llevo soñando y temiendo ese momento.

         En esos años, por mi cabeza han pasado muchos pensamientos, como el suicidio. Nadie en mi familia sabe nada y vivo yo solo mis miedos y mis angustias. Solo puedo decir una cosa, que por lo menos estoy fuera de ese infierno de las drogas, aunque ahora esté en otro infierno del que no sé como saldré. Tengo mucho miedo a lo que me depara el destino…

         Ahora llevo una vida normal, trabajo en una gran empresa y el día que llegue el momento del juicio no sé qué pasará. Ahora que tengo mi vida más o menos encauzada, el llegar a tener que entrar en prisión será volver a caer en un pozo. Pero si algo tengo claro, es que no volveré jamás a consumir drogas. Así es como afectaron las drogas mi vida: la destruyeron.

Juan José, 49 años
Madrid, España